El origen de las máquinas vending
En C&B Señor queremos hablarte acerca de el origen de las máquinas vending. Y es que sabemos cómo son actualmente pero, ¿nos hacemos una idea de cómo podrían ser en la antigüedad? O, ¿nos hacemos una idea al menos de cómo era su funcionamiento? Sigue leyendo este post tan interesante y descubre cómo eran antes las máquinas vending, descubre su historia y el por qué todo eso ha hecho que hoy día exista C&B Señor.
El antiguo Egipto
Aunque parezca una locura, la primera máquina vending surgió en el Antiguo Egipto. Y no solo eso, sino que además el funcionamiento era muy similar al que tenemos hoy en día. La primera máquina de la que se tiene constancia dispensaba agua bendita en los templos de Tebas. Se introducían monedas de tal forma que el peso de las mismas activaban válvulas por las que salía agua. Por lo tanto, ya en aquel entonces se recurría a mecanismos complejos con el fin de que una persona pudiera adquirir un producto o un servicio, aunque en este caso fuera agua bendita y su fin era lavarse las manos y la cara antes de entrar a los templos.
Revolución industrial
Aunque consideremos esa la primera máquina vending, no fue hasta la Revolución Industrial donde aparecieron las máquinas que hoy día conocemos o que por lo menos sus servicios eran similares a los de hoy en día.
En 1857 Simeon Denham había patentado la primer máquina vending que dispensaba sellos aunque el funcionamiento no era muy bueno. En 1883 Percival Everitt creó una máquina de dimensiones considerables que rara vez daba fallos en su funcionamiento, lo que hizo que se instalasen más de 100 unidades por Londres. Esta máquina dispensaba tarjetas postales y funcionaba tan bien que bloqueaba la entrada de la moneda cuando la máquina se quedaba sin producto. De esa forma, nadie pagaba por un producto inexistente en una máquina vacía.
Revolución industrial
Aunque consideremos esa la primera máquina vending, no fue hasta la Revolución Industrial donde aparecieron las máquinas que hoy día conocemos o que por lo menos sus servicios eran similares a los de hoy en día.
En 1857 Simeon Denham había patentado la primer máquina vending que dispensaba sellos aunque el funcionamiento no era muy bueno. En 1883 Percival Everitt creó una máquina de dimensiones considerables que rara vez daba fallos en su funcionamiento, lo que hizo que se instalasen más de 100 unidades por Londres. Esta máquina dispensaba tarjetas postales y funcionaba tan bien que bloqueaba la entrada de la moneda cuando la máquina se quedaba sin producto. De esa forma, nadie pagaba por un producto inexistente en una máquina vacía.
Todo esto por supuesto llegó a Estados Unidos. En 1888, una compañía de chicles llamada Thomas Adams Gum Company compró los derechos de la máquina que creó Everitt y lo utilizó para fabricar su propia máquina, la cual se empleó en el metro de Nueva York para dispensar chicles a los viajeros.
El siglo XX
Como todo, las máquinas fueron evolucionando vendiendo otro tipo de productos como cigarrillo, sellos, postales, etc. Pero no fue hasta principios del siglo XX donde las máquinas empezaron a expulsar bebidas gaseosas como las conocemos hoy en día. Eso sí, en la taza que cada persona llevara consigo. Las compañías de Coca-Cola y Pepsi tardaron poco en unirse a estas máquinas ya que todos sabemos que son bebidas gaseosas estrella.
1946 se considera un año clave en la historia del vending dado que se empezaron a distribuir por todo el mundo máquinas de café y fue todo un acierto. Todas aquellas personas que necesitara un café caliente, lo podían tener gracias a estas máquinas novedosas.
En 1960 se cambia el método de pago aceptando no solo monedas sino también billetes, algo que cambió sin ninguna duda la forma de pagar de las personas que no llevaran suelto en ese momento.
En la década de los 80 las máquinas empezaron a incluir tarjetas de crédito y débito en sus formas de pago.
El paso de los años
Como puedes ver, el origen del vending va mucho más allá de lo que nos imaginábamos y eso es lo que ha inspirado a C&B Señor a trabajar tan duro en máquinas que resulten novedosas y sobre todo prácticas para cualquier usuario.
Y conociendo la historia, ¿entiendes ahora el porqué de nuestro proyecto Origen? Antes los productos no deterioraban el medio ambiente, o al menos no tanto. Y las personas iban con sus propias tazas a rellenarlas de sus bebidas favoritas, ya fueran de café o de bebidas refrescantes. Por eso mismo C&B Señor se toma tan en serio el entorno natural y queremos que la gente vuelva a lo de antes, que las viejas costumbres no se pierdan.